¿CÓMO SE APRENDE A VOLAR?

Todos tenemos familiares o amigos de diversas edades y situaciones, y en nuestro entorno siempre hay algunas relaciones de padres e hijos. En ese contexto todos vivimos, o hemos vivido situaciones en las que no es nada fácil saber qué es lo correcto en cuanto a  “ayudar y/o proteger, o no, y hasta qué grado,  a los pequeños o más débiles”

Siempre hay razones para que en cada caso, en cada situación familiar y personal, cualquiera de las alternativas sea la más adecuada, o la menos adecuada. No voy a reflexionar ni dogmatizar sobre ello. Me voy a limitar a traeros a colación un texto que he sacado de un pps que llevaba la siguiente firma : “Exeçusao : Leandro Valdri”

"Un día, en una  pequeña abertura de un capullo apareció una oruga; un hombre se sentó a observar a la larva de mariposa durante varias  horas, viendo cómo se esforzaba  para hacer que su cuerpo saliera a través de aquel pequeño agujero.

Llegó un momento en que  pareció que la mariposa, a pesar de su esfuerzo, no avanzaba nada, parecía que había llegado a un punto en que ya no podía avanzar más...

Entonces el hombre decidió ayudarla y agrandó el agujero. La mariposa salió sin dificultad.

Pero su cuerpo estaba débil, las alas no estaban desarrolladas y las patitas no la sostenían.

El hombre continuó observándola esperando que en cualquier momento se lanzara a caminar y emprendiera el vuelo a través de las flores

Pero nada sucedió. La verdad es que la mariposa pasó toda la vida arrastrándose por el suelo. Fue incapaz de elevar el vuelo”

Lo que el hombre que con toda su buena voluntad quiso ayudar a la mariposa, no entendía es que, al hacer un gran esfuerzo para atravesar el pequeño agujero, los jugos vitales se iban distribuyendo y extendiendo por las partes del cuerpo que requerían fortaleza para volar. Al pasar el agujero sin ese esfuerzo, las alas no recibieron la sustancia necesaria

Algunas veces necesitamos el esfuerzo y la dificultad en nuestra vida..

Si pasáramos por nuestras vidas sin obstáculos, quedaríamos débiles. No llegaríamos a ser tan fuertes como deberíamos. Nunca podríamos llegar a volar.

Yo pedí coraje...Y Dios me dio obstáculos para superar

Yo pedí amor...Y Dios me dio personas con problemas a quienes ayudar

Yo pedí favores...Y Dios me dio oportunidades

Yo no recibí nada de lo que pedí...Pero he recibido todo lo que necesitaba

Vive tu vida sin miedo, enfrenta todos los obstáculos y demuestra que puedes superarlos. 

Envía este mensaje a tus amigos y muéstrales cuánto te interesas por ellos.

Leandro Valdrí